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¡Hola, ¿vendedor/a?!. Un día la vida me puso en la tesitura de conformarme con algo que no me hacía feliz personalmente ni me satisfacía económicamente, o dejar un confortable trabajo “fijo” por conseguir lo que quería. Algo así como cuando a los vendedores/as nos dicen “no”: o te retiras o avanzas hacia el “sí”. Y yo no quise ser un Gusiluz

No verás artículos míos publicados impartiendo lecciones sobre ventas cuyo contenido ya sabes porque lo has escuchado mil veces (lo difícil es atreverte, hacerlo y que funcione). Tampoco reseñas, ni fotos de la sesión que impartí ayer en una empresa. Soy consciente de que así reduzco mi visibilidad, pero los vendedores/as (y sus responsables) a los que entreno lo agradecen. Todo lo que vas a leer a continuación es el resultado de un proyecto profesional que se convirtió en personal en 2010.

Entreno a personas que venden y/o hacen que sus equipos vendan. No soy formadora ni coach ni psicóloga, de hecho, recurro a estos profesionales cuando es necesario. Entiendo que cualquier metodología debe  responder al “menos es más”Mi sueño era lograr un método de entrenamiento de vendedores/as eficaz, eficiente, flexible al 100%, discreto y potenteEl “café para todos” no funciona; trabajar sin ganas, datos ni estadística, tampoco.

«No es lo mismo hacer lo posible que hacerlo posible» (V. Carrasco)

“Cuando los vendedores pronunciamos la frase «no puedo», lo que realmente estamos gritando es: «no me apetece», «me da miedo», «no sé cómo hacerlo», y/o «hay factores externos que me están afectando»” (A. Barra de Miguel)

 

“Lo que no se mide, no se controla. Y lo que no se controla no se puede mejorar” (A. Frydman)

“Solo hay algo peor que formar a tus empleados y que se vayan. No formarlos y que se queden” (H. Ford)

Amparo Barra Formación

Actualmente

100% a éxito.

Actualmente entreno 100% a éxito si entrenado/a, responsable y empresa cumplen los requisitos necesarios para ello. ¡He descubierto que es como más me gusta trabajar!. La adrenalina sube, el esfuerzo se intensifica, los fracasos son rotundos, y los éxitos, aplastantes. Y lo combino con el puesto de responsable de formación en un Instituto Tecnológico.